Finalmente, el ERTE ha llegado a Loomis. Después de semanas de incertidumbre, de trabajar con escasez o falta de EPI´s, de estar expuestos al maldito virus COVID-19 más allá de nuestra jornada en muchas ocasiones, el único reconocimiento que recibe el trabajador por parte de la Dirección de Loomis Spain es la aplicación del ERTE en su mayor intensidad y alcance.
Desde ATES consideramos que hay una despreocupación total hacia el trabajador afecto al proceso del ERTE. Donde otras empresas han tomado medidas paliativas para suavizar los efectos del ERTE, como la percepción íntegra de las Pagas Extraordinarias, el devengo íntegro de las Vacaciones o algún complemento a la disminución salarial, en Loomis solo hemos encontrado rechazo y cerrazón, y una negativa total a cualquier concesión al trabajador que va a sufrir más duramente esta crisis.
Y por si esto no fuera suficiente, consideremos el injusto criterio de selección de los afectos al ERTE, el cual se va a prolongar durante más tiempo que la mayoría de las empresas del sector, y mientras que otras empresas han optado por un modelo rotativo y solidario (obviando los que se han ofrecido voluntariamente), en Loomis se hace recaer todo el peso de esta crisis sobre los hombros de unos pocos desafortunados, que tendrán que aguantar ellos solos esta situación de precariedad económica, con un horizonte final demasiado lejano en el tiempo.
Es por todo lo dicho que desde ATES, consideramos que Loomis no ha sabido estar a la altura, al lado de su empleado en estos momentos tan difíciles, y entendemos que para ser líderes del sector, » como la mujer del César, además de serlo, debe parecerlo».
Sección Sindical ATES LOOMIS